Madrid (España). Una investigación encontró que un asteroide podría colisionar con la Tierra en menos de 200 años, según un estudio internacional en el que han participado científicos españoles.
El estudio publicado en la revista 'Icarus', advirtió que hay una posibilidad entre mil de impactar con nuestro planeta, y más de 50 % de esa probabilidad apunta a que podría ocurrir en el año 2182.
"La probabilidad de impacto total del asteroide puede estimarse en 0,00092 -aproximadamente uno entre mil-, y más de la mitad de esta probabilidad -0,00054-, apunta a que esto podría ocurrir en el año 2182", según señala la coautora del estudioMaría Eugenia Sansaturio.
Los científicos han calculado y monitorizado los posibles impactos de este asteroide llamado '(101955) 1999 RQ36', hasta el año 2200 a base de dos modelos matemáticos, el método de Monte Carlo y un muestreo de línea de variaciones, para buscar posibles colisiones con la Tierra.
Este astro es potencialmente peligroso por la proximidad de sus órbitas y las consecuencias que un impacto de tal magnitud podría causar en la Tierra.
Al momento su órbita está bien determinada, pero existe una 'incertidumbre orbital' por el efecto de la gravedad y el llamado efecto Yarkovsky, pues éste modifica ligeramente las órbitas debido a que, al rotar, ciertos objetos pequeños del Sistema Solar emiten de forma desigual la radiación solar.
Si las predicciones no fallan, los investigadores confían que con esta información, se podría crear un mecanismo para desviar la trayectoria del asteroide con antelación.
Los científicos informaron que hasta 2060 la divergencia de las órbitas que impactan es moderada, aumentando su riesgo entre 2060 y 2080. Asimismo, el peligro aumento hasta 2162 para luego disminuir, pero en 2182 podría haber una coalición.
"La consecuencia de esta compleja dinámica no es únicamente una probabilidad de impacto comparativamente grande, sino también que un procedimiento realista de deflexión o desviación de la trayectoria sólo se podría realizar antes del encuentro en 2080, y más fácilmente antes de 2060", destaca.
Por fortuna fue descubierto este asteroide y no en 2080, pues la tecnología del momento no lograría la deflexión necesaria.
"Este ejemplo sugiere que puede ser necesario que la monitorización de impactos, que hasta ahora no cubre más allá de 80 ó 100 años, abarque más de un siglo. Así, las iniciativas para desviar este tipo de objetos se podrían llevar a cabo con recursos moderados, tanto desde un punto de vista tecnológico como económico", concluye.
http://pagoporclickbien.blogspot.com/
El estudio publicado en la revista 'Icarus', advirtió que hay una posibilidad entre mil de impactar con nuestro planeta, y más de 50 % de esa probabilidad apunta a que podría ocurrir en el año 2182.
"La probabilidad de impacto total del asteroide puede estimarse en 0,00092 -aproximadamente uno entre mil-, y más de la mitad de esta probabilidad -0,00054-, apunta a que esto podría ocurrir en el año 2182", según señala la coautora del estudioMaría Eugenia Sansaturio.
Los científicos han calculado y monitorizado los posibles impactos de este asteroide llamado '(101955) 1999 RQ36', hasta el año 2200 a base de dos modelos matemáticos, el método de Monte Carlo y un muestreo de línea de variaciones, para buscar posibles colisiones con la Tierra.
Este astro es potencialmente peligroso por la proximidad de sus órbitas y las consecuencias que un impacto de tal magnitud podría causar en la Tierra.
Al momento su órbita está bien determinada, pero existe una 'incertidumbre orbital' por el efecto de la gravedad y el llamado efecto Yarkovsky, pues éste modifica ligeramente las órbitas debido a que, al rotar, ciertos objetos pequeños del Sistema Solar emiten de forma desigual la radiación solar.
Si las predicciones no fallan, los investigadores confían que con esta información, se podría crear un mecanismo para desviar la trayectoria del asteroide con antelación.
Los científicos informaron que hasta 2060 la divergencia de las órbitas que impactan es moderada, aumentando su riesgo entre 2060 y 2080. Asimismo, el peligro aumento hasta 2162 para luego disminuir, pero en 2182 podría haber una coalición.
"La consecuencia de esta compleja dinámica no es únicamente una probabilidad de impacto comparativamente grande, sino también que un procedimiento realista de deflexión o desviación de la trayectoria sólo se podría realizar antes del encuentro en 2080, y más fácilmente antes de 2060", destaca.
Por fortuna fue descubierto este asteroide y no en 2080, pues la tecnología del momento no lograría la deflexión necesaria.
"Este ejemplo sugiere que puede ser necesario que la monitorización de impactos, que hasta ahora no cubre más allá de 80 ó 100 años, abarque más de un siglo. Así, las iniciativas para desviar este tipo de objetos se podrían llevar a cabo con recursos moderados, tanto desde un punto de vista tecnológico como económico", concluye.
http://pagoporclickbien.blogspot.com/
Niciun comentariu:
Trimiteți un comentariu